En este día, desearía hablarles sobre un tema muy interesante siguiendo la temática de la energía y viendo los puntos en los que la ciencia ha verificado a muchas teorías esotéricas aunque por orgullo, conveniencia, o posición, nunca les haya dado crédito públicamente.
Conocerán muchos a Sigmund Freud, el padre del psicoanálisis. Para los que no, o los que deseen refrescar su memoria, este hombre fue quien unificó los estudios sobre el funcionamiento de la mente humana en lo que es la psicología como la conocemos hoy en día y desarrolló el psicoanálisis, en otras palabras, su obra es la mayor parte de los libros que cualquier estudiante de psicología lleva bajo el brazo.
Hay otro punto interesante que quiero mencionar antes de proseguir y es que este hombre era judío y conocía por lo menos superficialmente los tres estudios principales del judaismo: La Torá, el Talmud, y la Cábala.
Lo que muchos ignoran es que en sus principios, Freud teorizaba sobre la existencia de una energía que daba voluntad de vida, el deseo sexual, de experimentar, ser, moverse. Es decir, eso que parecen tener en exceso James Bond y muchos personajes de películas de aventura que no pueden quedarse quietos un segundo ni dejar de andar enamorando a la protagonista femenina y viviendo sus aventuras de forma enérgica. Casualmente en la Cábala (uno de los estudios de los judíos como se vió anteriormente) hay indicios sobre esta energía aunque su estudio en el judaismo no está tan pulido cómo en el hinduismo, budismo, y medicina china.
Freud mencionaba en occidente que, según "su" teoría, los bloqueos o fugas que podían producirse en esta energía eran una defensa ante ciertas situaciones, y que de estas obstrucciones generaban los malestares psicológicos, por lo tanto para tener una buena salud mental (y física ya que ahora se sabe cada vez mejor que el cuerpo depende de la mente) había que hacer circular de forma correcta esa energía si había fugas, o hacerla circular con más fuerza si había bloqueos para "destaparlos" así como se hace ejercicio cardiovascular para eliminar el colesterol. Algo muy parecido al artículo sobre las "Baterías Humanas", ¿verdad?
Muy ingeniosa la idea de Freud de adaptar las creencias sobre la energía al pensamiento occidental científico, pero gran sorpresa se dió al ver que no era suficiente. Para la segunda mitad del siglo XIX todavía era muy alocada la idea de una energía recorriendo el cuerpo (el descubrimiento de la electricidad había sacudido al mundo hacía no tanto y era la idea que las personas tenían sobre "energía") y más aun la de hacerla circular a consciencia cuando esa energía tenía que ver con el ímpetu, el deseo sexual, la libertad y exteriorización de uno mismo, es decir, incluso en pleno siglo XX los Beatles eran algo sumamente satánico y deplorable por lo enérgico de sus artistas y canciones. Por eso fue adaptando la idea a la vez que realmente se volvía un científico más "occidental" poco a poco. Al final, esta energía fue tomando un carácter cada vez más teórico en sus escritos y en vez de hacer circular la energía con más fuerza para destapar los bloqueos, era ahora necesario eliminar los bloqueos directamente a través del psicoanálisis (lo que hacen los psicólogos), con respecto a las fugas, se caratularon como desviaciones de una mente trastornada y el psicoanálisis ayudaría hasta donde fuera posible.
Así fue que el primer intento real y serio de llevar la idea de una energía de la que dependía la salud a occidente fue moldeado (aún más por estudiantes posteriores a Freud) de acuerdo con las pretensiones de una sociedad que todavía no aceptaba ciertas ideas de forma tan brusca hasta llegar a deformarse en gran manera llegando a lo que es la psicología actual. Espero que les haya interesado y comenten qué les pareció. Bendiciones, Namaste.
Autor Azoth Excaliber
No hay comentarios:
Publicar un comentario